BAJO TU CIELO
Antes de que empieces a leer este post, debo recordarte que la chica que escribe este blog es una soñadora más en este mundo (por ende, no te saques de onda si sueno cursi hoy jajaja). Hey hey! 🐝 Ivanna de nuevo por estos rumbos 🧡😊 Ha pasado tiempo ¿eh? Entre el cierre de curso, los benditos bloqueos al escribir y que postergaba y postergaba y postergaba el nuevo post, mi cumpleaños número 21 llegó y con ello una nueva sensación de vida.
Hace tiempo que quería hablar contigo sobre algo que siempre me ha parecido maravilloso: el Cielo. Ese Cielo azul y grande que nunca deja de brillar sea día o noche; ese Cielo que atraviesa el mundo entero y sigue siendo el mismo aquí o en China; ese que recolecta muchas historias con esos paseos en bici o esos deseos a las estrellas fugaces. Ese Cielo que lleva rayitos de luz entre cada una de sus nubes; el Cielo que me reúne con mi vieja amiga la lluvia y que me regala tanta belleza con sus atardeceres veraniegos o sus amaneceres de invierno.
Un Cielo que me transmite tanto con solo voltear a verlo que, a pesar de ser la única en la habitación, sentirme sola no es algo de lo que padezco. Aquí es cuando me pregunto: ¿qué tan maravilloso es Él que con solo el Cielo me hace sentir fuerte y llena de luz? Verás, vivir en este mundo bajo ese azul puro es un regalo que solo unos cuantos han considerado.
Como siempre, empiezo con algo y acabo reflexionando más de la cuenta. Y es que, ¿cuántas veces hemos volteado al Cielo buscando una respuesta o pidiendo algo? ¿Tal vez volteado para agradecer? O que me dices de esos momentos de felicidad plena en donde volteas al Cielo inconscientemente como diciendo "¡vaya, si que estoy disfrutando esta vida!"; sea como sea, estoy segura de que por lo menos una vez lo has hecho sabiendo que te escuchan.
Déjame te explico a que quiero llegar con todo esto. Sucede y acontece que, como te lo mencioné anteriormente, hace unos días mientras escuchaba los coches pasar por esas calles nocturnas y veía el Cielo estrellado, me preguntaba cuán valioso es el tiempo y que tan bella es la vida que, para continuar, a veces solo basta con voltear arriba. Pueden pasar muchas cosas en la Tierra: puedes tener momentos malos en los que ya no sabes por donde seguir o momentos buenos en los que solo quieres quedarte a vivir; pueden pasar tormentas, días soleados y noches de estrellas en un suspiro. Puede pasar tanto en tan poco tiempo que el corazoncillo puede sufrir unos cuantos mareos. Así de fácil y así de sencillo pueden pasar las cosas, el secreto es confiar en ese azul interminable y saber que no estás solo por esta Tierra tan extensa. Dios siempre está ahí, basta una mirada para sentirlo y un poco de luz para caminar seguros y confiados en este mundo. Cuando creas que no puedes más, ese azul del que tanto hablo es el secreto por el cual siempre has podido continuar y avanzar; no te agites más y no tengas miedo porque al final del día este mundo siempre avanza bajo su Cielo.
Sin más que decir, me despido por el momento. No te olvides de brillar mucho, de disfrutar vivir y de soñar en grande. Que la mejor de mis vibras llegué hasta tu casita y que las bendiciones nunca falten 😊✨
¡Nos vemos en el próximo post!
- Ivanna

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